Por fin termino el diluvio universal y pudimos sacar las bicis a la calle. Este finde nos reunimos Marcos, mi hermano, Jesus, David M. y yo para llegar hasta Paterna, buen entreno para llevar cerca de un mes sin pedalear. Ademas, se pudo comprobar que las piernas siguen fuertes por los buenos piques que hubo durante la ruta, aunque habria que ir con mas calma que hay que darle base a las piernas. Lo mejor de la ruta, el desayuno en Paterna; lo peor, el frio que pasamos y sino que se lo pregunten a mi tocayo.
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